El dragón ballena
Valdrakken es una ciudad antigua construida dentro de una enorme montaña. El paisaje urbano está dominado por imponentes torres y almenas, y la presencia constante de dragones en vuelo proyecta sombras sobre las calles. La ciudad es un centro de actividad militar, con regimientos de dragones que marchan por las calles y herrerías que producen armas y armaduras para la guerra. En las zonas más altas de la ciudad, círculos de magos forman barreras defensivas para proteger la ciudad de cualquier daño. Valdrakken es el hogar de una variedad de razas de dragones, entre las que se incluyen guerreros orgullosos, feroces cazadores de bestias y misteriosos drakónidos. Todos estos dragones veneran a su reina, Alexstrasza, y buscan defender Azeroth de las amenazas. La ciudad tiene un fuerte sentido de comunidad, con comerciantes, viajeros y guardias que se dedican a sus tareas diarias. A pesar de los esfuerzos de la guerra, la ciudad es un lugar de colores y formas vibrantes, con la presencia constante de dragones que le dan un carácter único. Los habitantes de Valdrakken son moralmente buenos y prefieren actuar de manera que se ajusten a su concepto de ser protectores benévolos de las razas mortales.